Seguimos recorriendo la ciudad en busca de los sueños e ilusiones de miles de jóvenes que quieren estudiar una tecnología.

En la segunda semana de la convocatoria recorrimos las comunas Popular, Villa Hermosa y Doce de octubre, donde nos encontramos con historias inspiradoras de personas que ven en la educación el camino para transformarse.

Camilo es un joven de la comuna 8 (Villa Hermosa) que no ha tenido los recursos y las posibilidades para acceder a la educación superior. Desde que salió del colegio se ha dedicado a trabajar. “Yo quiero estudiar una tecnología para tener un buen empleo y poder ayudar a mi mamá con las cosas de la casa”, nos dijo.

Muchas veces estos sueños surgen inspirados por otras personas. Astul Arias García vive en el Doce de Octubre. En 2008 se graduó del colegio, finalizó sus estudios como técnico financiero del SENA y por su cuenta hizo cursos de sonido y música, que es algo que le gusta. Sin embargo, hay algo que lo apasiona más: la cocina.

“Estoy interesado en estudiar Tecnología en Gestión gastronómica en el Colegio Mayor. Eso es algo que he tenido desde niño. Mi abuelo era cocinero y él me enseñó muchas cosas. No he tenido la posibilidad de incursionar en el mundo de la cocina, pero con esta beca puedo cumplir uno de esos sueños”, contó Astul.

Cristian Felipe es otro de esos jóvenes apasionados por los aromas, sabores y colores de la cocina. Vive en la comuna 1 (Popular) y se enteró de la convocatoria por medio de una de esas cadenas de whatsapp a las que a veces cuesta trabajo creerles. Pero esta vez era cierto. “Estaba entre la Tecnología en Gastronomía o en la de Diseño Gráfico. Finalmente me decidí por la gastronomía porque siempre me ha gustado el arte culinario”, dijo.

Una beca tras otra

En el 2018 se otorgaremos 2.000 becas en el primer semestre y otras 2.000 más en el segundo, para seguir cambiando vidas como la de Orfi Solís y sus dos hijos.

Su hijo mayor se encuentra estudiando la Tecnología en Sistemas de Información en el ITM. Empezó en 2017 con una de las becas de Sapiencia y ya va en el segundo semestre. Una oportunidad que también quiere que tenga su segundo hijo.

Por eso cuando se enteró de la noticia de la convocatoria de Becas Tecnologías, averiguó cuándo iban a estar en su barrio y alistó todos los documentos para hacer la inscripción en la UVA de La Cordialidad, en Santo Domingo. Su hijo menor es un apasionado por los autos y quiere estudiar la Tecnología en Mecánica Automotriz del Pascual Bravo.

Las 2.000 becas son una oportunidad inigualable para que miles de jóvenes de la ciudad encuentren en la educación el mejor camino para sus vidas. Recuerden que hasta el 16 de mayo estarán abiertas las inscripciones en www.sapiencia.gov.co. ¡Atrévanse a soñar!